A día de hoy sabemos que la comunicación no es proceso exclusivo de los seres humanos. Los animales tienen sus propias maneras de expresar lo que sienten y necesitan, y en el caso de los perros, ladrar es su forma de hablarnos. En este mundo de patas y pelos entendemos la importancia de interpretar estos ladridos, especialmente cuando se dirigen a los vecinos, y te ayudamos a comprender por qué tu perro ladra cuando oye a los vecinos y cómo puedes manejar esta conducta. 

Aunque muchas veces suele ser molesto, sobre todo si es continuo y al parecer sin sentido, el ladrido de los perros, sobre todo hacia alguien que no es su dueño o algún conocido, tiene algún significado que es preciso descifrar de la mejor manera.

Puede ser incómoda a los vecinos esta actitud de nuestra mascota, mas cuando cada vez que alguno pasa sucede esto. Conocer por qué tu perro ladra cuando oye a tus vecinos podrá darte luces de qué hacer para minimizar esta conducta que muchas veces puede ser incómoda para todos.

¿Por qué mi perro ladra cuando oye a los vecinos?

Seguramente te ha pasado que tu perro empieza a ladrar a algo que tú no escuchas. Cuando las casas de un vecindario tienden a estar muy juntas o lindan unas con otras, el perro tiene que lidiar no sólo con los sonidos del propio hogar sino con los que provienen de las otras casas.

Es muy probable que tu perro tenga diversos motivos para manifestar su molestia o preocupación a partir de sus ladridos, muchas veces intolerables, y que parecieran no cesar tan fácilmente. ¿Qué puedes hacer para que el can deje de actuar de esa forma?

Tienes que indagar en los diversos motivos que desencadenan la exaltación de tu perro: curiosidad, peligro, temor, o si es tan sólo cuando escucha a los vecinos, y aplicar algunas técnicas para que él entienda cuándo debe ladrar y cuándo no debe. Como todos, los perros deben aprender a manejar ciertas situaciones.

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Las principales causas de que los perros ladren cuando escuchan a los vecinos son:

Sentido de alarma y protección del territorio

La territorialidad perruna es asombrosamente fuerte. Cuando hay personas o animales próximos al hogar, emiten sus ladridos tratando de dejar claro que hay un perro en casa y que ésta es suya. Los sentidos del olfato y el oído puestos en acción revelan presencias desconocidas para él. Ladrar es su forma de avisar y defender su espacio:

Defensa del hogar: El perro siente la necesidad de proteger su territorio de cualquier posible amenaza.

Presencias desconocidas: Los sentidos agudos del olfato y el oído permiten al perro detectar personas o animales cercanos, desencadenando una respuesta de alerta.

Falta de costumbre a nuevos estímulos o situaciones

Si tu perro está recién llegado a casa te has mudado recientemente a un nuevo hogar, puede que los ladridos imponentes de tu perro se deban a una falta de adecuación a situaciones que no conoce o a estímulos que para él son incontrolables. Esto puede llevar a que reaccione de manera exagerada:

Cambio de entorno: Un entorno más ruidoso puede hacer que tu perro se sienta inquieto y reaccione con ladridos a cualquier sonido nuevo.

Desconocimiento de vecinos: Los perros necesitan tiempo para acostumbrarse a las nuevas personas y situaciones.

La llegada de otro perro a casa

Miedos o traumas previos

Un perro manifiesta con sus conductas las experiencias que ha vivido. La manera como éste se comporta ante diversos estímulos están, generalmente, determinadas por su aprendizaje, sus traumas o los miedos que ha acumulado durante su existencia.

Es un hecho conductual animal que, si tu perro ha sido asustado por un ruido o por una persona, o ha habido algún incidente que lo haya marcado, situaciones similares desencadenaran ladridos y maneras de comportarse incontrolables, tanto para él como para su dueño. Es su forma de decir que eso lo estresa. Lo que puede desencadenar una respuesta de ladridos:

Recuerdos traumáticos: Un perro que ha sido asustado por un ruido fuerte o por una persona puede reaccionar ladrando cada vez que se repite una situación similar.

Asociación con peligro: La memoria del perro lo alerta ante cualquier cosa que pueda parecerse a una amenaza anterior

Asociación con experiencias negativas o positivas

El prodigioso oído de los perros les permite asociar sonidos con personas o con sucesos. Es muy común observar como un can se desborda en ladridos, saltos y giros cuando se aproxima su dueño, solamente porque escuchó el tintinear de las llaves de la casa o el coche.

Igualmente, si en algún momento una experiencia pudo marcarlo, por ejemplo, la caída de un objeto ruidoso muy cerca o encima de él, cada vez que escuche ese sonido o algo parecido, rememorará lo acontecido y responderá ladrando al objeto que pudo hacerle daño y huyendo del lugar, asocian sonidos con experiencias específicas, tanto buenas como malas:

Expectativa de eventos: Un perro puede ladrar de emoción cuando escucha sonidos que asocia con algo positivo, como el regreso de su dueño.

Reacciones a sonidos específicos: Un perro puede responder a un sonido específico que le recuerda un evento negativo, como un objeto que se cayó cerca de él.

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¿Cómo hacer que mi perro deje de ladrar a los vecinos?

Si quieres que tu perro ya no le ladre a tus vecinos, te aconsejamos los siguiente pasos que seguro te ayudaran:

Paso 1: Analizar la situación (observar lenguaje corporal, si es negativa o positiva)

No siempre es sencillo entender a tu perro. Cuando alguna situación, como ladrar a los vecinos, se sale de control, es necesario que evalúes qué conductas particulares llevan a tu perro a actuar así.

Cuando comienzan los ladridos, intenta determinar cuál fue el causante, antes de poner orden sobre.

Observa cómo ladra (los perros tienen diferentes maneras de hacerlo), a qué le ladra, cuál es su lenguaje corporal. Es importante determinar si el perro siente felicidad, rabia o temor, también pueden ser episodios ansiosos, para determinarlo puedes servirte de una cámara grabándolo para comparar sus conductas. Fíjate en su lenguaje corporal y en las circunstancias que desencadenan los ladridos:

Observar y grabar: Utiliza una cámara para grabar las reacciones de tu perro cuando ladra a los vecinos. Esto te ayudará a identificar patrones y posibles desencadenantes.

Evaluar el tipo de ladrido: Diferencia entre ladridos de emoción, miedo o alarma. Esto te dará pistas sobre cómo abordar el problema.

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Paso 2: Trabajar la habituación con dicho estímulo (simulando la situación repetidas veces, con premios, etc.)

Partiendo de un respeto por tu mascota, puedes ayudarla a bajar sus niveles de ansiedad y evitar los ladridos innecesarios. Empieza por adecuar a tu perro a ruidos que él ya conoce. Te puedes servir de grabaciones de ellos y al colocarlas observa su actuación. Pueden ser: pasos de personas, voces o el timbre de la puerta.

Si el problema es con los vecinos, regañarlo o castigarlo no resolverá la situación, sino todo lo contrario. Algunas estrategias pueden ayudar:

Exposición gradual: Reproduce grabaciones de los sonidos que provocan los ladridos y observa cómo reacciona tu perro. Aumenta gradualmente el volumen y la frecuencia.

Reducir el contacto visual: Bloquea las ventanas o usa cortinas para que tu perro no vea a los vecinos directamente, lo que puede reducir la intensidad de los ladridos.

Paso 3: Asociar la situación con estímulos positivos (premios, caricias, felicitaciones…)

Cuando logras descubrir que sonidos producen perturbación en el perro, puedes tratar de captar su atención cuando éstos aparecen y reforzar una situación contraria, dándole cariño, jugando con él y premiándolo cuando no ladra.

La disciplina positiva requiere paciencia, y, a veces, pareciera no resultar. Si eres constante, además de establecer un vínculo mayor con tu amigo peludo, evitarás molestas y ruidosas conductas y obtendrás muchas movidas de cola como respuesta.

Cambia la percepción de tu perro hacia los sonidos de los vecinos mediante el refuerzo positivo:

1. Premios y caricias: Recompensa a tu perro cada vez que no ladre ante un estímulo que normalmente lo haría ladrar. Usa golosinas, caricias o elogios verbales.
2. Distracción con juegos: Introduce un juego o una actividad que disfrute cuando comience a ladrar, para desviar su atención y asociar la presencia de los vecinos con algo positivo.

Paso 4: Establecer una Rutina de Adiestramiento

Consistencia y paciencia son clave para modificar el comportamiento de tu perro:

1. Programas de adiestramiento: Considera la ayuda de un adiestrador profesional si el problema persiste. En PerroPeloPatas.com, ofrecemos servicios de adiestramiento para manejar comportamientos no deseados.
2. Comunicación con los vecinos: Informa a tus vecinos sobre el problema y tus esfuerzos para resolverlo. Su comprensión y colaboración pueden ser muy útiles.

Consejos Adicionales

Evitar el Castigo

Castigar a tu perro por ladrar puede tener consecuencias negativas y empeorar el problema:

1. No al castigo físico: Evita los métodos de castigo físico o verbal, ya que pueden generar miedo y ansiedad en tu perro.
2. Fomentar el refuerzo positivo: Enfócate en recompensar el buen comportamiento en lugar de castigar el malo.

Crear un Ambiente Seguro

Proporciona un entorno seguro y calmado para tu perro:

1. Rincones tranquilos: Crea espacios en casa donde tu perro se sienta seguro y menos expuesto a estímulos externos.
2. Rituales de relajación: Introduce actividades relajantes como paseos tranquilos, juegos suaves o masajes para reducir el estrés.

Buscar apoyo profesional

Si el problema persiste, no dudes en buscar ayuda profesional:

1. Adiestramiento personalizado: En PerroPeloPatas.com, ofrecemos servicios de adiestramiento adaptados a las necesidades específicas de tu perro.
2. Consulta con veterinarios: Asegúrate de que no haya problemas de salud subyacentes que puedan estar contribuyendo al comportamiento de ladridos.

Conclusión

Entender por qué tu perro ladra cuando oye a los vecinos y cómo puedes manejar esta situación es vital para una convivencia armoniosa. Con una combinación de observación, habituación y refuerzo positivo, puedes ayudar a tu perro a adaptarse mejor a los sonidos del vecindario. Recuerda, la paciencia y la consistencia son clave. Si necesitas apoyo adicional, en PerroPeloPatas.com estamos aquí para ayudarte con servicios de adiestramiento y más.